Yo no soy esa mujer...

No me conquistas con frases clichés, no me enamoras diciéndome lo obvio... la mentira igual, la misma estrategia...

No te equivoques pensando en adularme, en exaltar esas virtudes que crees conocer. No imagines que el camino mas fácil son las frases simples que le dices a las demás. Yo no soy esa mujer... 

No muestres lo obvio por que como en un buen juego de poker conozco las cartas, las he jugado muchas veces. ¿Preguntas que si he perdido? ¡claro que si! pero prefiero contar mis derrotas como aprendizaje y mis triunfos como trofeos. 

Así que evita el juego obvio, la misma mirada, los mismos actos. No te llevaran a nada mas que mi niña interior riéndose de nuevo. Mirándote desafiante como un jugador mediocre y predecible. 

No muestres admiración por mi oficio, se que es fascinante por eso lo elegí. Y estoy segura que tu primer objetivo es meterme en tus sabanas... Así que te interesara mas descubrir mis formas que mis pasiones personales. De nuevo yo no soy esa mujer, la que se deslumbra con halagos por la persona que eligió ser. 

Que te quede claro que siempre tendré entre mis primeras cartas mi frescura y mi franqueza. Que le perdí el miedo a ser juzgada ya hace algún tiempo. Que simplemente seré yo, y en ese primer momento, odiosa, antipática y segura.  

Así que te pido que antes de jugar pienses tus movimientos... te anticipo que debes primero reconocer mis cartas y desbaratar mi juego paso por paso. Ahí ya habrás ganado esa primera batalla. 

Una vez decodifiques mi juego y expongas mis cartas habrás ganado la guerra.

Yo no soy esa mujer, la niña desubicada, la jovencita ingenua, la tímida morronga... soy la joven segura, la de las metas claras, la de los raspones en la rodilla. 

La orgullosa cabrona que se levanta sola, toma el taxi y se cuida a si mismas. y lo peor que me pasa a menudo soy yo misma así que no te tengo miedo.

Miénteme y prométeme, que yo te hare creer que te creo. Te lo prometo.   

Estefania.