Mi tarjeta de navidad

Luisgo,

Me gusta la Navidad. Es la temporada en el año que nos devuelven el significado de las cosas importantes. Son los días en donde recordamos el amor, la generosidad, la solidaridad, la familia y el amor. He sido muy afortunada, aún celebro Navidad con las personas que amo, en mi mesa nunca ha faltado las risas y la comida para compartir. Navidad siempre es sinónimo de milagros.

Así que desde esta rincón del mundo quiero desearte una Feliz Navidad, quiero que las bendiciones de mi ángel de la guarda te alcancen y hagan de tus días un milagro.

Y quiero dejarte una lista de deseos para tu siguiente vuelta al sol:

Enamórate de las sonrisas. La belleza es efímera pero una linda sonrisa jamás se apaga. Son eternas. Enamórate del alma de las personas, de las pataletas de la niña que te gusta, de su forma de soñar y ayúdala a construir sus sueños.

Perdona. Quítate esa carga de encima olvida lo malo, quédate en los bueno, en lo positivo. Guardar rencores marchita el alma.

Sé que hay días difíciles que quisiéramos botarlo todo, renunciar a todo y huir. Pero esos días son los que más sensatez necesitan. Ten presente que que cada día son 84.000 segundos, 84.000 regalos para volver a empezar. No tenemos nada más que este presente, hagamoslo hermoso.

Lucha por lo que quieres y por quienes quieres.  Y siempre sigue tu corazón, el es la mejor guía que tenemos.

Enfoca tu energía, recuerda lo que le dice el gato de Cheshire a Alicia, si no sabes para dónde vas, cualquier camino te sirve.

Nunca pierdas la capacidad de reírte, es tu mejor cualidad. Cultivala.

No corras, la vida no es una competencia con nadie, ni con nosotros. El afán agota y no deja lecciones positivas. Tomate tu tiempo, el tiempo de todos es distinto. No nacimos para tener relojes sincronizados o competencias épicas. Vinimos a dejar huella a conocer el amor.

Te deseo lo mejor.

Karen